«Testigos de la derrota de esta Comuna asturiana, bastante menos romántica de lo que asimismo se tiende a recordar, fueron tres periodistas […] Cada uno contribuye una visión diferente y complementaria de los hechos». Artículo sobre «Tres periodistas en la revolución de Asturias» en El Cultural. Artículo sobre «Tres periodistas en la revolución de Asturias» por Llucia Ramis.
Manuel Chaves Nogales y Josep Pla escribieron una serie de reportajes sobre una revuelta que ocasionó cuando menos mil quinientas víctimas. Los crímenes incontrolados y la represión posterior prefiguran las matanzas de 1936, en el momento en que las tapias de los cementerios y las cunetas se llenaron de cadáveres, evidenciando el fracaso de la convivencia en un país dividido por las ideologías y las desigualdades sociales. Octubre colorado en Asturias, relato novelado de José Díaz Fernández, da una perspectiva menos crítica, pero el balance final no es positivo. Hoy podemos decir que la insurrección de los mineros sólo agudizó las tensiones sociales, proporcionando argumentos a los sectores favorables a un alzamiento militar contra la Segunda República. Paradójicamente, los sueldos de los mineros eran mucho más altos que los de cualquier otra clase de trabajadores, pero tenía que ver con un trabajo duro y peligroso. El anarquismo había echado raíces en la zona y los mineros mucho más jóvenes, con acceso a la dinamita, se daban a conocer intranquilices, seducidos por el sueño de un mundo utópico, sin propiedad privada ni clases sociales.
La Madriguera Literaria
«Espléndidos documentos donde el periodismo despliega un eficacísimo arte literario junto a una definitiva intención de objetividad.» «Libros del Asteroide junta tres crónicas, en parte importante antagónicas entre sí, sobre los días de agitamiento de octubre del 34.» «Como un homenaje a tres de las plumas, como se afirmaría en aquel momento, más destacadas de la República, en general injustamente postergadas o silenciadas tras la guerra, se puede tomar «Tres cronistas en la revolución de Asturias».» Un libro que recobra un capítulo primordial de la narración de España del siglo XX. Para seguir gozando de los servicios de La Central, por favor, lee y admite la política de intimidad. Javier Fernández de Castro (Aranda de Duero, Burgos, Fontrubí, Barcelona, 2020) ejerció entre otros los oficios de corresponsal de prensa y profesor universitario (San Sebastián), aunque mayoritariamente su actividad laboral estuvo vinculada al planeta editorial.
Son inspiradas piezas literarias o periodísticas que manifiestan un criterio sobre una catástrofe que acentuó el odio entre la derecha y la izquierda, malogrando el emprendimiento de editar España en una nación moderna, próspera y democrática. Con la visión del tiempo, podemos asegurar que la revolución de Asturias formó un grave fallo. No hay ni un ápice de romanticismo en una sublevación que costó tantas vidas representando a una utopía inviable y poco deseable. España no necesitaba las supuestas bondades del comunismo libertario, sino avance económico, derechos laborales, educación, protección popular, independencia y tolerancia. La violencia de los mineros propició la violencia de los legionarios y los regulares, nutriendo el círculo infernal de las guerras civiles, donde se deshumaniza al contrincante para justificar su aniquilación. Tres periodistas en la revolución de Asturias es la crónica de un fracaso.
Ni en los trabajos de Pla ni en los de Chaves Nogales, raramente, se hace mención del general Franco, que, de manera diligente, desde el ministerio de la Guerra, a instancias de su titular, el extremista Diego Hidalgo, dirigió todas y cada una de las operaciones del Ejército en Asturias. Estos e-books solo tienen la posibilidad de canjearlos los receptores en tu país. Una reseña muy interesante en el año que se cumple el dos cientos aniversario del nacimiento de Karl Marx.
Reseña: Tres Periodistas En La Revolución De Asturias
Estas reformas estuvieron estrechamente similares con la anexión de la Península de Crimea en 2014, ya que criticarla o reclamar públicamente que Crimea es parte de Ucrania (o habría de ser de esta forma) se transformó en un hecho castigable por la legislación rusa. Estos cambios asimismo implican que con la Constitución rusa de hoy, es inconstitucional ceder cualquier una parte de la Federación rusa a otro país. «Si esperan entender mi opinión,no voy a exponerla. Pero os voy a explicar el porqué». De esta manera empezaba a charlar el presentador Andrei Norkin el pasado diez de noviembre en el canal privado NTV para comentar laretiradade las tropas rusas deJersón, territorio reconocido como ruso por Moscú, pero considerado ucraniano por lacomunidad en todo el mundo.
Solo los movimientos de humanidad que frenaron puntualmente la violencia nos permiten evaluar nuestro pasado sin caer en un estéril pesimismo. Fueron 2 de los primeros periodistas que pudieron entrar en Asturias una vez restablecido el orden republicano; desde allí contaron los hechos acontecidos a lo largo de las un par de semanas precedentes, en las que se llegó a acuñar moneda propia y ciudades como Oviedo han quedado destrozadas. La narración de como Tres periodistas en la Revolución de Asturias llegó a mis manos es bien simple, pero para ser justos deberíamos comenzar por el auténtico principio, el cual, se remonta a mi adolescencia. La primera vez que escuché charlar de la Revolución de Asturias fue en la clase de historia de Cuarto de la ESO.
Artículo sobre «Tres cronistas en la revolución de Asturias» en Qué leer. «Tres periodistas en la revolución de Asturias es un relato estremecedor de lo que ocurrió entonces.» Producto sobre «Tres periodistas en la revolución de Asturias» en La Vanguardia. Producto sobre «Tres cronistas en la revolución de Asturias» en el A.C.Cultural. Reseña de «Tres periodistas en la revolución de Asturias» por Pedro A. López Gayarre.
La Ley de Responsabilidades Políticas que organizó la represión tras la guerra, de hecho, tuvo efectos retroactivos y escogio esa como punto de partida. En este blog hallaréis comentarios, cuentos, además de otras secciones de opinión, crítica, entrevistas, cine, artículos… Esta regla asimismo se aplica a los territorios recién anexionados del este y sur de Ucrania como nuestra Jersón, Zaporiyia, Donetsk y Lugansk. Además también combate cualquier intento de secesión de alguna de sus regiones, como ahora pasó en los años 90 con Chechenia.
Nunca había leído nada de este autor antes, y tras haber leído su crónica en este libro me han entrado ganas de conocer el resto de su obra. Para finalizar, sugerir la obligatoria lectura del prólogo de esta edición al cargo del escritor Jordi Amat. En él, el lector va a poder saber datos biográficos de los protagonistas y saber las claves para disfrutar de una lectura tan importante. José Díaz Fernández, para quien los hechos eran muy cercanos, publicaría por año siguiente el libro Octubre rojo en Asturias, un informe novelado sobre exactamente el mismo tema. Este volumen recoge los textos de estos tres enormes escritores sobre la revolución de Asturias, un capítulo clave de la historia española del siglo XX.
Siempre creyó en la necesidad de un arte puesto en compromiso y sin sombra de elitismo. Afiliado al Partido Republicano Extremista Socialista, logró un escaño en el Congreso de los Diputados a lo largo del bienio reformista. Descartó escribir simples artículos, pues comprendió que una novela reflejaría mejor lo sucedido. Octubre Colorado en Asturias se publicó por entregas en Períodico de La capital española y en 1935 apareció con apariencia de libro. Díaz Fernández atribuyó la obra a José Canel, supuesto innovador, limitándose a firmar el epílogo, donde exponía sus conclusiones sobre la situación política de España tras el brote innovador, salvajemente abortado por las Banderas de la Legión y los Tabores de Regulares. La revolución de Asturias no fue una gesta épica o romántica, sino más bien una catástrofe política, popular y económica que preparó el lote a la cruenta guerra civil de españa, un drama cuyos estragos aún perviven en la memoria colectiva.